Mientras se define la licitación de los últimos balnearios de Playa Grande, los marplatenses y turistas encontrarán este verano menos playa pública que la temporada pasada.
Influenciado por el accionar del mar y profundizado por las privatizaciones de algunos sectores de la costa, en los últimos años la ciudad de Mar del Plata ha perdido una significativa porción de playa pública.
Desde que Gustavo Pulti llegó a la Intendencia de General Pueyrredon se pudo comprobar en cada verano como se fue perdiendo metros de espacio públicos en las playas.
En ese sentido, el gobierno municipal se mostró demasiado permisivo en que la concesión de los hoteles Provincial y Casino incluyeran balnearios de las dimensiones que presentan y que abarcan más de la mitad de la superficie que actualmente tiene la tradicional Bristol y Playa Popular 2.
Una situación similar se produjo con la adjudicación de Punta Iglesia donde, en vez de dejar ese espacio de la costa para ser utilizado por el público en general, se resolvió avanzar con un proceso licitatorio y la consiguiente privatización de esa playa. no obstante, desde el municipio afirmaron que el pliego incluyó menos carpas que en concesiones anteriores, aunque no dejó de ser una privatización de una playa pública.
Mientras que, en Playa Grande, la licitación incluyó una unidad turística fiscal pegada a la escollera norte que condiciona el acceso a la playa pública desde ese sector.
A pesar de este escenario, el verano pasado el gobierno local aseguró que se redujeron en un 20% los espacios de sombra en balnearios de áreas de jurisdicción municipal, producto de un compromiso con empresarios de quitar filas de carpas.
Mientras que, se espera durante 2012 que se pueda avanzar con el refulado de arena que permita ganar metros de playa al mar.
La ex concejal Cristina Coria, quien fuera integrante de la comisión de Recursos Turísticos del Concejo Deliberante, recordó que “muy por el contrario de lo que planteaba cuando Pulti era concejal, el Intendente ha hecho un avance importante en lo que hace al concesionamiento de playa pública y sin ir muy lejos en alguna de sus campañas la hizo caminando Punta Iglesia remarcando que esos sectores debían volver a ser públicos y luego al llegar al gobierno se mandó el pliego de licitación y se concesionó el sector”.
En declaraciones a Radio la Red (FM 91.3), la dirigente de la UCR aclaró que no está en contra del concesionamiento de playas, “me parece positivo que se pueda generar una buena oferta de servicios, pero es el Estado quien debe fijar las reglas de juego y determinar los sectores que pueden ser concesionados, cuánto espacio público se necesita en una ciudad que recibe cada vez más turistas y tiene una mayor población y controlar que esos equilibrios se cumplan”.
Por: Gonzalo Patrone
PUNTONOTICIAS
Radio La Red (FM 91.3)
Fuente: puntonoticias.com
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