Mar del Plata, destino de inversiones


La ciudad, además de ser el destino elegido por millones de turistas, se enfrenta al desafío de consolidar su crecimiento para recibir empresas y garantizar más fuentes de trabajo.

por Alejandro Aníbal García (*)

La semana pasada tuvo lugar en Mar del Plata el 47° Coloquio Anual de IDEA en donde el gobernador Daniel Scioli, destacó la importancia de sostener el modelo de desarrollo económico y social logrado en Argentina en los últimos años frente al contexto de crisis generalizada en Europa y Estados Unidos.

El desafío de la provincia en los próximos años será promover una mayor industrialización del interior de la provincia, hecho que involucra directamente a Mar del Plata al ser la principal ciudad de dicha región. No solo en cantidad de habitantes, sino que también en cuanto importancia económica, luego del conurbano bonaerense y La Plata.

La provincia de Buenos Aires implementará a través del Plan de Regionalización, una revolucionaria reforma de su estructura de gobierno, con el objeto de impulsar y equilibrar el desarrollo social y económico de sus localidades. Buenos Aires cuenta con 15 millones de habitantes distribuidos en 30 millones de hectáreas. Su producto bruto geográfico es de 140.000 millones de dólares, casi el 40% del total de los bienes y servicios producidos en el país. Sin lugar a dudas, Mar del Plata va a tener un rol estratégico para consolidar el futuro desarrollo del interior de la provincia.

Lo que le importa a la Argentina

La agenda económica internacional que interesa al país está focalizada en tres grandes ejes: el impacto que puede tener en Argentina la crisis financiera que está castigando a Europa y Estados Unidos, la influencia en la economía nacional de la inserción de Asia (con China a la cabeza) en el circuito económico mundial y, el desempeño de nuestro principal socio comercial: Brasil, cuya moneda viene experimentando un sostenido proceso de devaluación.

La importancia de países asiáticos tales como China e India, más allá de sus titánicas cifras demográficas, afecta de manera directa al sistema productivo mundial dado que se están incorporando a diario miles de trabajadores. Estos últimos poseen una alta calificación y son capaces de producir gran parte de productos y servicios tradicionalmente de «Occidente» a un costo muy inferior. La falaz creencia popular de que «lo oriental» está asociado a la baja calidad de un producto, es cada vez más difícil sostener. La realidad nos indica que son capaces de generar mejores productos y servicios, a un costo excesivamente menor. Por otro lado, dicha expansión genera un incremento de la «clase media mundial», concentrada anteriormente en Occidente. En los próximos años habrá que satisfacer las demandas, no solo de alimentos, de una clase ABC1 oriental. Turistas incluidos, hecho que Mar del Plata debiera empezar a considerar.

Gran parte del crecimiento de los próximos 20 años estará impulsado por el que experimenten países como China, India, Brasil, Indonesia, Rusia, México, Egipto, Turquía y Taiwán. Entre estos, encontramos dos actores estratégicos en la economía local como son: Brasil y China.

En la actualidad, hay que apostar a la complementariedad económica con Brasil y Asia. Como coinciden muchos analistas: Argentina puede ser a Brasil, lo que Canadá es a Estados Unidos. La devaluación del real en alrededor de un 20% respecto al dólar en los últimos dos meses, sumado al déficit bilateral acumulado a septiembre de 4.501 millones de dólares, se presenta como una amenaza temporal en el corto plazo. Sin embargo, debemos considerar que se estima que la clase media brasilera pasara de 79 millones de consumidores en 2003 a 143 millones en 2014. El incremento del mercado interno brasilero y asiático es la llave de la expansión económica argentina a futuro.

Mayor producción y trabajo local

La estructura productiva argentina se enfrenta al desafío de lograr su «independencia económica» respecto a la importación de ciertos bienes intermedios y de capital, como así también de otros productos, que bien pueden ser producidos en el país. Las inversiones extranjeras no deben ser consideradas una amenaza, en la medida que se direccionen a generar asociaciones estratégicas que no desplacen la industria nacional sino que la potencien. La calidad de los recursos humanos, y la diversidad de recursos naturales que posee el país, se presenta como una ventaja comparativa que pocos destinos poseen. La cantidad de bienes y servicios producidos en Argentina se estima cercana a los 350.000 millones de dólares. En 2010, el país exportó por 70.500 millones de dólares. En el 2020 el Plan estratégico Agroindustrial se puso como meta exportar al mundo productos por una cifra de 100.000 millones de dólares.

Los anuncios de inversiones en el país difundidos por el Ministerio de Industria de la Nación la semana pasada, resaltaron que entre enero y setiembre del 2011 se informaron casi 20.000 millones de dólares en inversiones destinadas a incrementar la infraestructura productiva, como así también nuevos proyectos. La provincia ha hecho grandes avances con la ley de promoción industrial generando incentivos fiscales, el impulso de los microcréditos para el desarrollo de pymes, entre otras obras públicas destinadas a mejorar la infraestructura en materia productiva, logística vial, portuaria, turística, energética, educativa y sanitaria. La cantidad de obras públicas en la ciudad y la zona, son prueba de ello. El Parque Industrial General Savio con sus más de 60 empresas radicadas, se presenta con un gran potencial. Del mismo modo es necesario apoyar el desarrollo del sector frutihortícola y agropecuario, como la industria textil, pesquera, naval, alimenticia y tecnológica.

En los foros internacionales como el G-20, se coincide en algo: la clave para enfrentar la crisis es garantizar el trabajo y la inclusión social, más allá del crecimiento de cada país. Argentina con el modelo de asignación universal por hijo, es un caso destacado al respecto. El aumento de producción de bienes y servicios que se traduzcan en empleo, es la mejor manera de evitar cualquier crisis, erradicar la pobreza, garantizar la seguridad ciudadana y mejorar el futuro de las próximas generaciones de marplatenses.

(*): Licenciado en Economía

Deja un comentario

Subir ↑